viernes, 6 de abril de 2018

Espejismo de ayer






































Foto xanela


Después de que los desapacibles
cielos
acordaran una tregua,
hemos disfrutado ayer
de un espejismo,
de un hechizo,
placeres diminutos
abandonando
el callado sueño invernal
para crecer a la luz de lo inmenso.

El frescor de la tierra
colándose
entre las piedras
se hacía  flor.

La sangre
recobraba su color
en la memoria del gorrión. Su
loco frenesí  convertido
en canto
emocionaba a esta loca
de la vida.

Lo bueno dura poco…
¿Pero qué es lo bueno?
Este rítmico tartamudeo
de viento y lluvia
sobre los cristales,
hacen bailar mis manos
sobre el ordenador
con cierta alegría.





5 comentarios:

Jorge Torres Daudet dijo...

Un bonito renacer de la primavera en tus versos.
Besos.

Ligia dijo...

Muy lindos los versos primaverales. Abrazos

Marisa dijo...

Gracias Jorge
gracias Ligia.

LA ZARZAMORA dijo...

Ese alborozo de un instante que baila y sonríe ante la llegada de los brotes que germinan inundándonos de sol, flores y algarabía: Primavera.
Sutil encuentro con ella ;)

Besos, Xanela.

Marisa dijo...

Gracias Eva.

Besos